Lesiones y lecciones de yoga
Para quienes practican yoga, éste sí que es un tema…Nuestra mente condicionada a la usanza occidental nos exige éxitos y metas en todo.., partiendo por los deportes y competencias cuando nños y jóvenes, luego en la vida profesional y personal.
Así, todo lo vamos midiendo de acuerdo a los logros que vamos acumulando…pero, qué pasa cuando incorporamos a nuestra vida una disciplina que no es medible bajo éste punto de vista, como el yoga?
Tendemos inevitablemente a mirar la práctica física del yoga por sí sola y eso es sólo “Asana” o Postura (la tercera rama del Ashtanga).
Ashto significa “ocho” y “anga” es “rama o etapa”, así ashtanga yoga son los 8 pasos hacia la realización personal compuesto por: -Yama, Niyama, Asana, Pranayama, Pratyahara, Dharana, Dyana, Samadhi. Por supuesto que cada uno desglosa una profundidad enorme…
Si nos enfocamos sólo en YAMA o “Códigos u observancias Morales”, nos habla sobre la manera en que las personas deben responder a sus semejantes y relacionarse con ellos y con todos los seres vivos para conseguir un mundo pacífico y armonioso. En la práctica de Asana, el practicante ha de respetar los límites y la capacidad de su propio cuerpo.
Yama nos recuerda la acción no-violenta, en Asana el practicante sentirá frustación ante la dificultad de realizar alguna postura en particular…Paciencia y tolerancia, ésta frustación puede conducir a forzar alguna postura sin preocuparse de alguna parte del cuerpo y ésto derivará posiblemente en lesión.
BKS Iyengar dice que : “se trata de posiciones difíciles y potencialmente peligrosas que han sido creadas para enseñar a los alumnos de yoga a relacionarse con sus propios cuerpos, no con violencia sino con respeto y amor.”
Ser sinceros en sus relaciones consigo mismos y con los demás, en la práctica de asana, es necesario ser franco contigo mismo sin albergar expectativas egoístas, aceptar en qué nivel te encuentras sin pretender conseguir más. La práctica necesita Devoción, Disciplina y Entusiasmo, dentro de límites razonables.
No posesividad, en relación a la práctica de Asana, es mejor que la practiques sólo durante un tiempo limitado, el que necesites para mantener tu salud física, en lugar de exigirte tanto, movido por el deseo de ser mejor de lo que eres…ésta parte del código moral de Yama nos enseña a despojarnos del “apego a progresar” y a permitir que ese progreso acontezca de forma espontánea.
Si la práctica de Yoga es sin las observancias de la mente, considéralo sólo un stretch del cuerpo y probablemente puedes caer en una lesión para entender y recordar el propósito final de la práctica. En éste sentido considera cada una de las dolencias del cuerpo como una maravillosa purificación, una vuelta a mirar con mucha humildad el estar frente al mat.
En Clases de yoga.com hay una traducción al artículo de Carol Krucoff “Insight from Injury” (en una traducción libre..): “7 maneras para evitar lesionarse”
Artículo publicado en Yoga Journal.
“La lesión es sin duda el Gran Maestro de la práctica, nos devuelve la atención consciente de manera amplificada, nos baja el ego que siempre quiere más y mejor y nos regresa al mat con una actitud más humilde, más yóguica, Ahimsa: No-Violencia. Lo único malo es que es un Maestro demasiado duro y algo severo. ¿Se puede encontrar la compasión y al mismo tiempo la perfección? ¿Hacer y al mismo tiempo no-hacer, en el momento preciso?”
“A pesar de este enfoque sobre los riesgos durante la práctica, el Hatha Yoga es una de las formas de “ejercicio” más seguras”, dice Lewis Maharam, médico del deporte de Manhatan y director del New York City Marathon. “Con frecuencia recomiendo Yoga a mis pacientes, especialmente a los corredores, quienes tienen una fuerte tendencia a la rigidez. Si ocurren lesiones en cualquier actividad –incluyendo yoga- casi siempre tiene que ver con tratar de hacer mucho, demasiado rápido.”
Foto: del Flikr de Mastapiannis